¿Qué es mindfulness y cómo se practica?

Entonces mindfulness es una práctica de entrenamiento mental que te ayuda a reducir los niveles de estrés, liberando los pensamientos negativos y calmando la mente para lograr un mayor beneficio físico y espiritual.

Por eso, combina la meditación con la práctica de atención plena, para que puedas enfocarte en el “ahora”, reconociendo tus pensamientos, sentimientos y sensaciones sin juzgarlos.

Practicar la meditación de atención plena no requiere accesorios ni preparación. Todo lo que necesitas para comenzar es un lugar cómodo para sentarte, de tres a cinco minutos de tiempo libre y una mente abierta y libre de pensamientos limitantes.

Beneficios de mindfulness

1. Conocerás tus pensamientos limitantes.

Y para explicarte esto, nos remitiremos al yoga y una de las enseñanzas más importantes de Buda. En nuestra vida cotidiana tenemos la tendencia de crear sufrimiento y pensamientos negativos en nuestra mente.

Creemos que nuestro sentido de "nosotros mismos", o quiénes somos, está fuertemente influenciado por actividades como el egocentrismo, el apego y la discriminación.

Cuando practicamos la atención plena sin juzgar, podemos descubrir más sobre nuestras motivaciones, nuestros sentimientos y reacciones, y volvernos más conscientes. Y ese es uno de los beneficios de mindfulness más importantes.

2. Entrenarás tu mente

A medida que te vuelves más conocedor de tus pensamientos, sentimientos y motivaciones, puedes explorar nuevas formas de ser, que te llevarán a ser más amable y más comprensivo con tu propia persona.

3. Liberarás tu mente

El “no juzgar” es una gran parte de la filosofía budista, y el tercer propósito es practicarlo contigo mismo. Esto te ayuda a poder conservar el aquí y ahora con más claridad, dejando de lado las emociones no deseadas y a permanecer relajado mientras te abres a recibir cosas positivas.

Cómo empezar a practicar mindfulness

La meditación de atención plena es cualquier práctica de meditación que hacemos con la intención de regresar al momento presente, a través de nuestra atención enfocada.

La duración de la práctica puede variar desde un par de minutos hasta una hora con la posibilidad de continuar durante períodos mucho más largos de silencio ininterrumpido.

Empieza dónde estás justo ahora, en este momento. Incluso dos minutos al día pueden marcar una diferencia significativa en tu tranquilidad y sensación de bienestar.

El primer paso para comenzar una práctica de meditación de atención plena es elegir el momento. Experimentar. Prueba a primera hora de la mañana. Prueba después del almuerzo. Prueba antes de acostarte.

- Y empieza con dos minutos. Puedes ir aumentando tus tiempos de meditación y atención plena a medida que tu mente y cuerpo se acostumbran a la práctica.

Existen diferentes tipos de meditación de atención plena. Elige cualquier forma en la que te sientas cómodo.

Meditación guiada: la forma más sencilla de comenzar una práctica de meditación de atención plena es con un maestro. Puedes encontrar en internet numerosos tutoriales gratuitos de meditaciones guiadas.

 Meditación caminando: cuando caminas con intención y con una presencia profunda, estás practicando una forma de meditación consciente. Tomar conciencia de tus pasos y tu entorno te devuelve al ahora.

Alimentación consciente: comer con plena atención a través de nuestros sentidos puede ser una práctica de atención meditativa.

Escaneo corporal: en la quietud, cuando te conectas, a través de tu mente, con todas las sensaciones de tu cuerpo, estás practicando la meditación de atención plena y profundizando tu conciencia del momento presente.

Meditación enfocada en la respiración: sean cuales sean tus circunstancias, la respiración puede ayudarte a regresar al cuerpo y al presente, alcanzando la paz mental. Pon tu atención en tu respiración, sin intentar cambiarla, y eso te llevará a un estado de atención plena.

Creemos que en este momento ya tienes una idea más acabada acerca del significado de mindfulness.

La atención plena no es una práctica religiosa ni dogmática. Hoy en día, la atención plena es practicada por personas de todo el mundo, con diferentes idiomas, culturas y creencias espirituales.

El objetivo de cualquier práctica de atención plena es llevar tu atención al momento presente. Si bien la mente es una gran viajera en el tiempo, porque continuamente nos invaden pensamientos, el cuerpo solo está donde está.

Entonces, cuando practicas mindfulness vuelves al momento presente y utilizas el cuerpo como un ancla para lo que realmente está sucediendo aquí y ahora.

Entonces, elige una posición cómoda, cierra los ojos y ayúdate con la respiración para concentrarte en el aquí y ahora. Inspira y exhala. Observa los movimientos de tus costillas y estómago mientras respiras.

- ¿Puedes sentir la sensación de las plantas de tus pies?

-¿Puedes notar la sensación en tu pecho?

-¿Puedes notar tu respiración?

¡Felicitaciones! Has dado tu primer paso en la meditación y la atención plena. El primero, de muchos pasos que te llevarán a disfrutar de una vida más plena, enfocada en el aquí y ahora.

¡Namaste!